Estas pólizas generalmente proporcionan una suma global de dinero que se paga a los beneficiarios designados tras el fallecimiento del asegurado. Este dinero puede usarse para cubrir una variedad de gastos finales, como el servicio funerario, el ataúd o urna, el cementerio o lugar de entierro, y otros gastos relacionados.

Las pólizas de seguro para gastos finales suelen ser más fáciles de adquirir que otros tipos de seguros de vida. A menudo, no requieren un examen médico completo y pueden emitirse con menos preguntas de salud.

Al igual que con otras formas de seguro de vida, el asegurado designa a los beneficiarios que recibirán el pago de la póliza en caso de fallecimiento.

A diferencia de algunos planes de prenecesidad funeraria, que pueden estar limitados a ciertos proveedores o servicios, el dinero de una póliza de seguro para gastos finales generalmente se puede utilizar como lo decidan los beneficiarios.

El costo de una póliza de seguro para gastos finales puede variar según varios factores, incluida la edad y el estado de salud del asegurado, así como el monto de cobertura deseado.

Asesoramiento profesional: Consulta con expertos en planificación financiera y legal para establecer un plan detallado para cubrir los gastos finales.

Testamento y documentos legales: para garantizar que tus deseos se cumplan y tus bienes se distribuyan según tus instrucciones.

Gasto de funeral y entierro: Cubre los costos asociados al servicio de funerio, ataúd, la cremación, la ceremonia y la disposición final.

Transporte y alojamiento: Puede incluir el transporte del cuerpo, el alojamiento para familiares cercanos y otros gastos relacionados con el funeral.

Pagar deudas pendientes: Ayuda a saldar deudas pendientes, como préstamos personales, tarjetas de crédito, hipotecas o créditos estudiantiles.

Cubrir gastos médicos: Asegura que las facturas médicas no pagadas no se conviertan en una carga a tus seres queridos.

Apoyo financiero: Proporciona una cantidad de dinero específica para ayudar a la familia a mantener su calidad de vida después de tu fallecimiento.

Educación y necesidades futuras: puede destinarse a cubrir los gastos educativos de los hijos o nietos, o para garantizar que los cónyuges o dependientes tengan recursos suficientes para sus necesidades futuras.

Diferentes niveles de cobertura: Ofrece opciones de planes con diferentes niveles de coberturas y primas para adaptarse a las necesidades y presupuestos individuales.

Beneficios adicionales opcionales: Posibilidad de agregar beneficios adicionales, como cobertura de enfermedades graves o protección de ingresos, según las necesidades específicas.